La salsa cocktail le da un toque culinario ideal a los platos. Las prisas son malas consejeras cuando andamos entre fogones. Cada ingrediente, cada producto, encierra en su interior múltiples posibilidades y aplicaciones culinarias, pero es cierto que siempre terminamos utilizándolo de forma rutinaria y sin aportar valor. La salsa cocktail tiene una doble funcionalidad por un lado es un ingrediente de aderezo ideal para muchos platos como la el cóctel de mariscos y además nos sirve para decorar cuando se utilizan en fiestas o en reuniones familiares.
Para hacer una sensación gourmet distinta y única, uno de los usos recomendados es mezclarla con queso crema, así quedará perfecta para hacer canapés, rellenos para unos deliciosos volovanes o para unas originales tartaletas. Otra gran opción es hacer una versión «rosa» de la tradicional ensaladilla rusa. Este contraste llama a los invitados y aporta un sabor al paladar y colorido a la mesa sin igual. Platos con bechamel se puede incluir en ella. Esta salsa rosa también es ideal para hacer pasteles de pan de moldes con pudines y pescados. Así como el fantástico pastel vegetal. Además la posibilidad de tomar salsas sin gluten para poder disfrutar de todos los platos las personas intolerantes.